Me quedé sin papel específico para acuarela.
Al menos no eran de las calidades que suelo usar. Pero eso nunca es motivo para
no emprender una nueva acuarela. Tenía varios pliegos de papel lienzo, que
utilizo normalmente para acrílicos, tinta china o gouache, pero que también
pueden servir para pintar con acuarela.
Tenía papel lienzo, y también tenía a Antinoo
desde hacía varias semanas rondando por mi mente.
Antinoo. Figura 1. Acuarela sobre Papel Lienzo. |
Digo esto porque, hay algunas personas que están todo el día
comprando materiales y no pintan nunca. Por el contrario, otras, no tienen
tantos materiales, y, sin embargo, no paran de pintar. El equilibrio estaría en
tener tantas ideas, como materiales para plasmarlas.
Siempre he hablado sobre el conocimiento de los materiales como
primer paso antes de empezar en el mundo de la acuarela. Hay artistas que,
inicialmente tienen la pulsión de pintar, y después buscan los instrumentos
necesarios para llevar a cabo su inspiración. Y, si las tiendas están cerradas
y los envíos tardan en llegar, pintan con el mismísimo plumero, con el cepillo
de dientes, la brocha del colorete o un bastoncillo aplicado a cualquier papel
o cartulina: la caja de detergente desplegada, la portada del periódico o la
parte de atrás del calendario de turno. Hay veces en que sucede eso, la
necesidad de pintar, ese algo que viene a ser como un aprieto cuya fuente no se
sabe en dónde radica y que nos pone manos a la obra. En este sentido, todo nace
de un deseo indescifrable que algunos han llamado el “estro”.
De hecho, la Real Academia de la Lengua Española define el estro como la Inspiración ardiente del poeta o del artista.
Y ante dicha inspiración no cabe otra acción que darle salida. La emoción es
aquello que nos mueve. Y uno de los caldos de cultivo de la mayoría de los
artistas.
Antinoo. Figura 2. Acuarela sobre papel Lienzo. Final |
Y ¿Qué sucede si ante dicha sensación uno no tiene papel idóneo?
Que pinta en otros que cree menos idóneos, o incluso en los tabiques. Así
empezó el Arte Rupestre a falta de pasta de papel y de inventos. Para un
artista y su estro, no hay obstáculos. Eso forma parte de la creatividad. El
ser más creativo no es el que mejor pinta, es el que más soluciones aporta ante
una idea o problema. Por eso, ahora en que por fin se sabe lo que es la creatividad,
que no significa precisamente que uno esté todo el día pintando flores o
componiendo cancioncillas, las personas de gran de creatividad son buscadas por
las empresas. Las empresas continuamente tienen que sortear problemas. Por
supuesto que para ello hay capacidades, conocimientos y especializaciones, pero
uno de los rasgos psicológicos para desentrañar obstáculos, o salvarlos, es el
rasgo creativo de las personas.
Y ahora vayamos al momento en que había agotado mis papeles y en
que me encontré con varios pliegos de papel lienzo. Antinoo ya estaba en mi
cabeza. Acababa de releer Las Memorias de Adriano, de Margarite
Yourcenar, de contemplar por no sé cuántas veces el Antonio de La
Galería Uffizzi de Firenze (Italia), el indefinible de El
Museo del Prado de Madrid (España), y el que yo veía como la
perfección del equilibrio y la racionalidad en el rostro: El Antinoo de El
Museo Arqueológico de Delfos (Grecia).
Antinoo, el efebo divinizado por Adriano, llevado a las cotas
máximas de la Historia del Arte en su plasmación escultórica del ideal, eso es
lo que quise plasmar aquí, sin alejarme de la verdad artística, porque uno
corre el peligro de estropear siempre, aplicando tan sólo otras técnicas.
Proceso de la acuarela ANTINOO sobre papel lienzo. Acuarela paso a
paso:
Lo primero que hice fue elegir un punto de vista bajo. Con ello
quería resaltar la potencia del personaje, la belleza terrestre que nos mira
desde arriba, porque se sabe superior, y nos encandila. Pero también quise
abrir ese gran espacio sobre su cabeza. Aparentemente es un vacío. Pero solo
aparentemente. Ondea sobre esa belleza pasmante, que nos detiene y trasciende.
Una vez seleccionado el punto de vista y el perfil que me gustaba,
dibujé. Sin apartarme del original, o apartándome sólo en la medida de la
precisión que puede tener una mano impulsada por un cerebro de Homo Sapiens.
Las esculturas de Antinoo nos sobrepasan.
Antinoo. Figura 3. Acuarela sobre papel Lienzo. Fase Inicial. |
Después pinté con acuarela reduciendo la paleta al máximo: Siena
Tostada, Ocre Amarillo, Azul Ultramar y Negro. El Carmín de Alizarina solo lo utilicé, como
siempre, mezclado con Bermellón,
para el punto de la firma.
Antinoo. Figura 4. Acuarela sobre papel Lienzo. Proceso |
Al pintar sobre lienzo, por si hacéis la prueba, comprobaréis que
el papel, al ser muy plástico, a veces reacciona a su modo, y no siempre
mandamos sobre ello. Eso puede ser bueno o no. Depende de las reacciones y a
donde nos lleve. Pero hay que dejar actuar al agua.
Así hice.
El resultado fue este que veis. (Figura 2). En algunos sectores me
encantó lo que me devolvió el papel, unas calidades de tela transparente, o
menos transparentes. En otros sectores se me abría la pincelada, quedaba demasiado
mate, y el resultado no era bueno. Para esto hay muchas soluciones: Goma
Arábiga, que no tenía, o algún barniz para acuarela, que también se me había
acabado. Otra solución era incidir sobre los espacios matificados oscuros que
no me gustaban con nueva carga de acuarela, pero, al ser papel lienzo, que
absorbe menos que el de acuarela específico, al final podía llegar a una balsa
de oscuro de esas que acaban secando en clave blanquecina.
Los medievales utilizaban clara de huevo y azúcar como aglutinante.
Opté por el azúcar. Cogí agua limpia y bastante azúcar. Apliqué sobre algunos
oscuros y algunos claros. Y se quitó ese efecto de pincelada mal aplicada.
(Figura 5)
Antinoo. Figura 5. Acuarela sobre papel Lienzo. Detalle con veladura de agua azucarada en algunos sectores. |
Después inserté a Antinoo entre tres elementos:
El primero, las puntas de diamantes que nos marcan la dirección.
Antinoo es un diamante de la Tierra. Es la Belleza.
Antinoo. Figura 6. Acuarela sobre papel Lienzo. Puntas de Diamante. Direccionalidad. |
El segundo, apliqué algo de técnica de collage insertando
papel de periódico y pegándolo con pegamento en spray, para apartarlo, por un
lado, de la escultura clásica, y como elemento compositivo que lo literaturiza,
como así nos ha llegado el personaje. Como alguien que está entre lo real
histórico, que fue y existió, y lo literario perteneciente a su recreación. No
sabemos la realidad del rostro de Antinoo, pero, desde luego, si posee la
octava parte de armonía y de belleza que sus recreaciones artísticas, era un
rostro imposible de no ser contemplado. (Figura 6).
El tercero, por detrás y por encima de la cabeza de Antinoo, puse
unas pompas de cristal que lo sumen en la ingravidez, desde el carbono de las
puntas de diamante y la belleza de la tierra, hasta lo gaseoso del espacio
superior, trascendente y misterioso.
No se vende.
Antinoo. Figura 7. Acuarela sobre papel Lienzo. Pompas de cristal. Detalle. Macarena Márquez Jurado |
Dejo muestras de cuanto he explicado, para que experimentéis con
los materiales y texturas. No siempre lo ortodoxo es lo mejor. Y esta acuarela,
aunque he pintado con acuarela, no es una acuarela tradicional al uso.
Experimentad. Dejaos sumir en el misterio del Arte. Porque el Arte siempre
regala.
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Macarena Márquez Jurado Wikipedia
Libros de la autora:
Treinta y siete minutos en el atasco - Novela
Bárbara de Braganza - Biografía Histórica
Me gustó lo del papel de diario.creativo y la explicación de su uso es coherente
ResponderEliminarGracias María Isabel. Lo del papel lo utilizaron los cubistas como punto de conexión con la realidad. Da mucho juego. Saludos!
ResponderEliminarEstupendo!!! Gracias por no solo mostrar, sino enseñarnos a ver, a contemplar, a entender y sentir el arte!!!
ResponderEliminarGracias Diana. El Arte me ha aportado siempre mås de lo que soy capaz de asumir. Así lo vivo e intento comunicarlo. Porque sé que nos mejora. Es muy gratificante que personas como tú recojan lo poco que no se me escapa. Muchas gracias.
ResponderEliminarAntinoo realmente es la Belleza según lo cuenta y lo expresa y lo pinta. Gracias.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por compartir. A ver si me animo, que estoy de parón. ¡ Saludos !
ResponderEliminarBlanca
Gracias por su amable comentario, Blanca. Todo es empezar, colocar el papel, agua, pinceles y acuarelas. Después es no parar! Saludos
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